En las montañas solitarias de Japón, Tatsu, un joven artista salvaje y prodigioso, pinta dragones con la esperanza de liberar a su amada, una princesa que cree transformada en criatura mítica. Su arte, impulsado por la obsesión y el deseo, conmueve a Kano Indara, uno de los más grandes pintores japoneses de su tiempo, firme defensor de la tradición y enemigo declarado de las técnicas occidentales, quien le ofrece la mano de su hija. Tatsu se verá así arrastrado a una historia de amor, locura y sacrificio que lo llevará a enfrentarse con los misterios más profundos de la tierra del sol naciente.
Ambientada en el Japón de principios del siglo XX, El pintor de dragones es una novela breve pero intensa que explora la intersección entre el arte, la pasión y la tradición. Con una prosa lírica y contemplativa, Mary McNeil Fenollosa ofrece una mirada fascinada y conocedora sobre una cultura en transición, donde los valores antiguos resisten el avance del mundo moderno.
Mary McNeil Fenollosa vivió en Japón junto a su esposo, el célebre orientalista Ernest Fenollosa. Juntos integraron un influyente círculo de intelectuales occidentales cautivados por Oriente, entre ellos Lafcadio Hearn. Allí escribió esta novela, una de las primeras obras de ficción occidental que logra habitar el imaginario japonés sin condescendencia ni exotismo. Fue adaptada al cine en 1919 y es considerada una obra fundamental en el encuentro entre Oriente y Occidente.
El pintor de dragones - Mary McNeil Fenollosa
Mary McNeil Fenollosa (Alabama, 1865 – Nueva York, 1954) fue una escritora, poeta y guionista estadounidense que dedicó gran parte de su vida a explorar los vínculos entre Oriente y Occidente. Se casó con el filósofo y crítico de arte Ernest Fenollosa —uno de los introductores del arte japonés en Estados Unidos— y vivió junto a él varios años en Japón durante el periodo Meiji, experiencia que marcó profundamente su sensibilidad literaria.
Mary publicó varias novelas bajo el seudónimo de Sidney McCall, y colaboró activamente en la difusión de la literatura y el pensamiento japonés en Estados Unidos. El pintor de dragones, su obra más reconocida, fue la única publicada con su nombre real en 1906. Fue adaptada al cine en 1919, en una de las primeras producciones estadounidenses en retratar Japón con respeto y sensibilidad.
Además, Mary fue una figura activa dentro del grupo de escritores e intelectuales occidentales fascinados por Asia, entre los que se contaban Lafcadio Hearn, Edward Morse y Percival Lowell.
Tapa blanda
250 páginas
12,5 x 18 cm
Edición en español
Isbn: 9789569673474